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Análisis de "Anomalisa", por un espectador promedio.

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Introducción a análisis de Anomalisa 

Anomalisa, guionada por Charlie Kaufman y dirigida por él junto a Duke Johnson, es una película de animación stop motion ambientada en el 2005 que comenzó como un radio play y luego se editó y se produjo para la pantalla grande.

En el radio play, nos cuenta Kaufman, los actores estaban sentados, alejados entre sí, sobre el escenario, y había una desconexion sobre lo que el público estaba viendo y sobre lo que estaba escuchando. Para pasarlo a la pantalla grande, Kaufman ha tenido que editar el material y agregar o cambiar algunas cosas que, al ser observables, tendrían que ser evidentes. Por ejemplo, en el radio play se habla sobre un problema físico de Lisa, pero no se especifica ni dónde está ni cómo es, pero en la pantalla grande se tradujo como una pequeña cicatriz en el rostro. Sin embargo, a pesar de algunos misterios resueltos al hacer esta transición, aún nos quedan muchos más para analizar. FUENTE

Acá traigo mi propia interpretación luego de ver la película, con algunas opiniones personales, otras simples observaciones y narraciones de la película o diálogos, y otras preguntas que dejaré abiertas a la interpretación , pues son indescifrables para mí.

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Análisis de la película Anomalisa 

El inicio de la película nos sitúa en lo que es, para mí, el punto central de la historia: la depresión. Cierro los ojos y escucho. El sonido es el mismo que podríamos escuchar nosotros en un viaje en avión. La misma tonalidad de las conversaciones y risas, que se convierten en tan solo un murmullo en nuestro oído. Observamos y escuchamos la misma voz en cuerpos diferentes: esto indica monotonía y desinterés por parte de Michael. Darle una voz diferente a cada persona sería darles una entidad y, por lo tanto, una importancia que, para nuestro protagonista, no tienen.

Luego de tomarse una pastilla [¿de qué es esa pastilla?, ¿para la depresión, quizás?], lo primero que hace Michael es leer la carta de su antigua amada, Bella, y suspira. El pasajero acompañante le pide perdón por tomarle la mano, y Michael le quita importancia al asunto. El pasajero insiste, se excusa, le explica, cada vez que se le acerca a hablarle parece que lo tuviera justo al lado de la oreja y dan ganas de codearlo para que se calle. Pero Michael no va a iniciar una pelea, no va a actuar desmesuradamente violento ni tampoco va a pedirle que se calle y se aleje. No, porque Michael es un "hombre promedio", como vos o yo. Por eso es amable con el taxista, por eso no quiere crear alborotos en el bar del hotel cuando pelea con Bella, por eso le da propina al botones, por eso solo piensa en mirar una película cuando por fin llega al hotel, por eso le carcome el pasado y por eso sigue casado aunque ya no quiera a su mujer.

Michael está muy aburrido. Por eso escucha música, por eso tararea cuando se sube al taxi en vez de simplemente callar, por eso se agarra el tabique como si sufriera algún dolor de cabeza cuando el taxista le habla de cosas sin importancia. Porque Michael está terriblemente aburrido y vive una vida desmotivada. Sin embargo, a pesar de encontrarse agotado con la monotonía de la vida, no es grosero. Le pide amablemente, y casi hasta con simpatía, al taxista que lo lleve a su hotel, Frigoli. Y aquí debo hacer un stop y expandir con wikipedia:

"El síndrome de Frégoli es un desorden neuropsiquiátrico en el que el paciente insiste que conoce a una persona que realmente no conoce. Se caracteriza por que los pacientes se sienten perseguidos por una persona a la que creen ver en todas partes, por un individuo que es capaz de adquirir la apariencia de alguien conocido, el aspecto de personas de su entorno familiar cambiando la cara como si fuera un actor. Como todo delirio, se trata de un sistema de creencias incoercible e inmodificable, que requiere de tratamiento psiquiátrico con medicación del grupo de los neurolépticos." FUENTE

Pareciera coincidir parcialmente con la situación de Michael, ¿no? Entonces el misterio está resuelto: Michael tiene un desorden psiquiátrico, eso explica que todos luzcan exactamente igual. De ahora en más, podemos observar la película y disfrutar de las aventuras (o desventuras) de Michael, sabiendo que las anomalías que se presenten durante la película se explican por su síndrome.

Pero no. Kaufman, en una entrevista, nos explica: una vez que él escribe algo, la interacción es entre la persona que la está mirando y la obra, y no quiere impedir que esto se logre limitándolo al explicar la obra. Así que nuestro querido Kaufman no nos brindará ninguna ayuda en el análisis y comprensión de la película, sin embargo, sí nos deja un único inicio: nos cuenta que la película comenzó con el descubrimiento de aquél síndrome, es cierto, pero que Michael no lo tiene. Así que será nuestro trabajo descifrar qué es lo que le sucede al protagonista. FUENTE

Cuando llega al hotel, escuchamos a gente reconocerlo: "Michael Stone. Es Michael Stone", murmuran. ¿Es su imaginación o realmente nuestro protagonista es conocido? Preguntas que se responderán solas más adelante en la película. Lo que sí notamos al ingresar al hotel es un gag, entre los muchos que aparecen en la película: el recepcionista tecleando sin mirar; el pasajero en el avión aún sosteniéndole la mano; cuando no entiende qué botón debe tocar para ordenar la comida; la escena del vecino masturbándose; cuando regula el agua de la ducha; cuando Lisa parece terminar de cantar y Michael la interrumpe; etc., etc., etc. Y mi favorito: la conversación con el botones. La forma en que el botones repite y alarga las palabras para no cortar la conversación y darle rienda suelta al silencio. ¿Cuántas veces hemos visto a alguien así o nos hemos encontrado a nosotros mismos en el lugar del botones?

Cuando llega a su habitación, comienza otro detalle que me encanta de la película, que son los suspiros de cansancio de Michael: cuando espera que le atiendan el teléfono, mientras el empleado del teléfono le habla, cuando se sienta en la cama. Están siempre allí, mostrándonos un Michael cansado, aburrido, agobiado y profundamente desmotivado.

Aprovecha para llamar a su esposa. Al inicio se le nota con ánimos, está dispuesto a contarle cómo fue su vuelo y cómo se encuentra, pero entonces su esposa se pone a hablar con el hijo, lo llama para que se calle. Le dice que está hablando con "papá", y entonces vemos que Michael ya se fastidia. Pero no se enoja ni se pone desagradable con la mujer, ni mucho menos con el hijo. Simplemente se fastidia.

Luego la pelea de la parejita en el pasillo:
- Fuck you.
- Fuck you.
- Fuck you.
- Fuck you.
¿No es aquél un resumen acertado de la mayoría de las peleas de pareja?

También parece entusiasmado cuando llama a Bella, y aún más cuando se la encuentra. Ella tiene la misma voz y el mismo rostro que todos, pero igual él se emociona al verla. Bella le comenta que ellos eran especiales juntos y él coincide honestamente con ella, pero cuando ella le pregunta por qué la abandonó, él no puede explicarlo. Le dice que cree que quizás él tenga problemas psicológicos: pero, ¿no es acaso lo que todos pensamos alguna vez al sentirnos fuera del molde? Es que es la única solución que Michael encuentra para su problema.

Quizás es por eso que está tan emocionado de ver a Bella: quizás ahora pueda entender por qué se había aburrido de ella. ¿Por qué se aburrió, si hacían buena pareja, si había química, si parecían estar destinados el uno para el otro? "¿Qué cambió?", le pregunta a Bella y al mismo tiempo se pregunta a si mismo, ¿qué es lo que cambió?, ¿hubo un cambio?, ¿sentís que cambiaste?, ¿yo cambié?, ¿qué cambió?. Se siente solo. La invita a la habitación, para tener una plática más a gusto, para quizás tener relaciones, buscar qué es lo que cambió y por qué, quizás intentar volver a lo de antes. "Solo estoy tratando de entender", le grita, ante la mirada de mil rostros iguales.

Entonces Michael se emborracha y sale a comprarle un juguete a su hijo a la tienda que el taxista le recomendó al inicio, que resulta ser un sex shop. Pero ve algo: una muñeca. Pregunta qué es, y le dicen que es una antigüedad Japonesa... es inusual. Por eso le gusta, porque es inusual. Es linda, dice.

Luego, una ducha. Desempaña el vidrio y se mira. Y esta es la escena de la duda, de la interpretación. ¿Qué le pasa en la cara?, ¿por qué se mueve?, ¿por qué parece estar repitiendo todos los movimientos que normalmente hace? Michael se observa y se toca la cara. ¿Qué va a hacer?, ¿va a sacarse lo que parece ser una máscara?, pero, ¿qué hay debajo de esa mascara? ¿Por qué la tiene puesta?, ¿qué pasa si se la saca?, ¿no puede mostrarse frente a la gente sin la máscara? ¿Por qué? ¿Qué es lo que oculta? ¿Qué ocultamos nosotros detrás de nuestras máscaras?

Pero entonces escucha otra voz. Por primera vez, en toda la película, escuchamos una voz femenina. Pero no es importante, creo yo, que sea femenina: es importante porque es diferente a las demás voces. Sube y baja la tonalidad, no resulta monótona al oído. No sé si el linda o es fea, simplemente es diferente. "¿Alguien más?", se pregunta él. ¿Será que ya no va a estar solo?

Así es como conocemos a Lisa. Una mujer no muy inteligente, ni muy linda, que viste como niña, que tiene una cicatriz sobre su ojo, es insegura y es, de hecho, bastante torpe. Es diferente, pero de no ser porque Michael percibe su voz y su rostro diferente al de los demás, no nos resultaría nada llamativa. También conocemos a Emily que, según nos relata Lisa, es más centrada, simpática y bonita, pero bajo la mirada de Michael, y en consecuencia la nuestra, resulta igual a los demás.

Es curioso cómo, a pesar de que Lisa en otro contexto no nos parecería ni remotamente interesante, ahora que estamos en el mundo de Michael nos maravillamos con aquella muchacha. Su voz suena tan placentera en mi oído después de haber escuchado durante casi media hora las mismas dos voces, que comienzo a compartir el sentimiento de fascinación de Michael. Y cuando habla, queremos que siga hablando; y cuando canta, queremos que no pare ya nunca.

Luego, la escena que lleva el romance al momento cúlmine y luego la confesión: "No quiero perderte. Pierdo a todos". "¿Qué quieres decir?" "No lo sé. No importa". Y yo pienso en Bella... durante un año en cama, depresiva, creyendo que perdió a Michael, que la abandonó. Y, en verdad, fue Michael el que primero perdió a Bella. Sintió que la perdió, al igual, quizás, que perdió a su mujer y a su hijo.

Después la pesadilla. El gerente del hotel, el darse cuenta que todos los demás son iguales, incluso el hijo y la esposa "¡No existen, son tan solo 'ellos'!", y Michael diciéndole: "Finalmente te encontré". Finalmente, encontró a alguien diferente. Tienen que escapar, tienen que permanecer juntos...

Se despierta. Revolucionado por el sueño, insiste en quedarse junto a Lisa, convencido que es lo que debe hacer. Se lo propone: ella duda, después acepta, festejan, se besan, se concreta, y cuando finalmente consigue todo lo que quería... la ola vuelve a su causal. La monotonía regresa, incluso en Lisa.
"A veces no hay lección. Esa es una lección en sí misma"


El discurso de Michael en Anomalisa:

"Recuerden siempre que el cliente es un individuo, como tú. Cada persona que atiendes tuvo un día, algunos buenos, otros son malos, pero todos han tenido uno. Cada persona que atiendes tuvo una infancia, cada uno tiene un cuerpo, cada cuerpo tiene dolores.

¿Qué significa ser humano? ¿Qué es lo que duele? ¿Qué es estar vivo? No lo sé. ¿Qué es lo que duele?, no lo sé. ¿Qué es estar vivo?, ¡no lo sé!

¿Cómo hablo con un cliente?, ¿cómo hablo con un cliente? Estas son las preguntas importantes para un representante de servicio al cliente. "¿Qué digo? ¿Sonrío mientras estoy en el teléfono?" Bueno, la gente puede percibir tu sonrisa, incluso sin verte, ¿sabías eso? Inténtalo como un experimento con un amigo. Vamos, háganlo.

Estoy perdido. ¿Ven?, estaba sonriendo cuando dije eso. He perdido mi amor. Está en un bote que se va rumbo al mar y no tengo a nadie para hablar, no tengo a nadie con quien hablar, no hay nadie con quien hablar.
Lo siento. No quería molestarlos con eso. Es sólo... ¿qué más puedo hacer?, porque no tengo a nadie con quien hablar.

Sean amigables con el cliente. Piensen en ellos como un amigo...

Me dan ganas de llorar, pero no puedo. ¿Cuándo va a terminar?, ¿cuándo va a terminar? Mi cara se contorsiona como si estuviese a punto de llorar pero nada sale, necesito lágrimas. Es como si no pudiesen llegar. Necesito lágrimas que me ayuden a escapar de esta pesadilla.

Sí, como sea, no olviden sonreír. Mejora el día del cliente, ¿qué les cuesta? "Sonreír es grátis"

Esto no está funcionando, no está funcionando, no está funcionando... ¡EL MUNDO SE ESTÁ CAYENDO A PEDAZOS! ¡El presidente es un criminal de guerra! América está colapsando y ustedes están hablando estupideces como "diseño inteligente". Están destruyendo intencionalmente el sistema educativo porque es más fácil manipular trabajadores y soldados estúpidos.

Emh... sean presentables. Recuerden creer en ustedes mismos, crean en su empresa y en sus productos o servicios...

Cada noche sudo en mi almohada. Creo que hay algo muy, muy mal conmigo.

Sean amistosos. Sí, ¿cuánto les cuesta? Busquen lo especial en cada individuo. Enfóquense en eso durante sus conversaciones. Nuestro tiempo es limitado, nos olvidamos de eso. Sí, la muerte viene, así es, pronto, como si nunca hubieras existido. Así que recuerden sonreír...
Recuerden que hay alguien ahí afuera para todos. Alguien a quien amar. Recuerden que cada persona con la que hablan necesita amor. Recuerden que..."

Anomalisa película

Análisis del final de Anomalisa

La vuelta a casa. La fiesta sorpresa con gente que ya no reconoce. Michael confundido, su mujer preocupada. "No quiero que te vayas", le dice Donna a su marido. "No me voy a ir", le responde Michael, "¿A dónde podría ir?". La muñeca, la antigüedad que tan maravillosa le había parecido a Michael comienza a cantar y a su hijo le fastidia, así que pide permiso para ir a jugar. "Me quedaré hasta que acabe", le dice Michael. Entonces su hijo se va, su mujer tampoco está. Es su fiesta de bienvenida y se queda solo, sentado, observando la antigüedad que canta con la voz de Lisa que ya no es de Lisa, sino de alguien más. Ambos, solos e incomprendidos, al ritmo de Momotaro.
La última escena, Lisa despidiéndose de Michael en una carta, deseando volver a encontrarlo en algún futuro. Quizás Michael la haya decepcionado al irse, pero al menos le dejó un apodo que la acompañará para siempre, dándole un significado especial y propio. Y se despide con él: Anomalisa. A su lado, Emily la mira y podemos, por fin, apreciar su verdadero rostro

¡Qué bello es el mundo fuera de la mirada de Michael!

2 comentarios:

Ojito lo que pones